“Ahora puedo ver a mi esposo”, dijo Ana Medina, “ya mis hijos”.
La vista de Ana estaba severamente limitada. No podía conducir, tenía problemas para encontrar las aceras cuando caminaba hacia una tienda y no podía ver las líneas blancas en la calle que la mantendrían segura mientras caminaba.
Todo eso ha cambiado. Como paciente de Church Health Eye Care, Ana recibió anteojos que le devolvieron la independencia. Ella está manejando ahora, lo cual es de gran ayuda para su familia.

Ella se ríe de la mejor parte. “Antes no podía ver los rasgos faciales de mis hijos. Todo estaba borroso. Pero ahora, cuando me hacen muecas, puedo decir: 'Te puedo ver'”.
Visitar Church Health Eye Care y obtener sus anteojos le da a Ana nueva confianza y esperanza.
“Estoy agradecida con Dios y con Church Health”, dice Ana. “Otros no deberían esperar tanto como yo. Entra. Haz lo que tengas que hacer para recibir atención”.
A través de su generosidad, podemos ayudar a más habitantes de Memphis brindándoles la atención médica de calidad que merecen.